El 17 de noviembre, el FC Barcelona anunció un amistoso en Dallas ante el Club América el 21 de diciembre para recaudar fondos debido a dificultades financieras.
Dicho amistoso se confirmó después de la derrota del Barça en Hamburgo frente al Shakhtar en la Liga de Campeones.
A pesar del malestar de los jugadores, el Barça planeaba obtener una ganancia de 11,2 millones de euros con cuatro victorias en la fase de grupos de la Liga de Campeones.
Sin embargo, la derrota en Hamburgo puso en peligro la meta financiera del club, ya que solo se habían logrado tres victorias hasta ese momento.
Oportunidad perdida en Alemania
De haber ganado en Alemania, el Barça habría alcanzado su objetivo financiero, pero la derrota hizo que se perdiera la oportunidad.
Crisis de tiempo
El club no podía esperar a ver qué sucedía en los últimos dos partidos de la fase de grupos, por lo que optó por organizar el amistoso rápidamente.
Incentivos para la plantilla
Se planea que la plantilla reciba una bonificación discreta por participar en el encuentro frente al Club América.